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Rectores chilenos ven el ChatGPT como una herramienta de aprendizaje y no de camino al plagio
Las autoridades universitarias dicen estar dispuestas si es que las nuevas tecnologías los llevan a nuevas formas de evaluar.
Natividad Espinoza R.
Aún es difícil visualizar en todas las áreas en las que la Inteligencia Artificial (IA) va a contribuir y de eso están conscientes en todos los sectores. En la educación, por ejemplo, ya existe algunos que "mal usan" el ChatGPT como "delegarle" a la tecnología el desarrollo de sus ensayos e incluso tesis. Sin embargo, sobre ello, los rectores de universidades chilenas aún están optimistas.
Así lo dieron a conocer mientras se realiza el V Encuentro Internacional de Rectores Universia, apoyado por el Banco Santander y que tiene como sede la ciudad española de Valencia. En la cita, que este año se desarrolla bajo el lema "Universidad y Sociedad", y en la que participan alrededor de 700 rectores y líderes universitarios de 14 países, uno de los temas principales ha sido la tecnología y IA, con ChatGPT como uno de sus grandes exponentes.
Pero, ¿es este sistema de chat algo beneficioso o perjudicial para la educación?
"La formación en valores hoy en todo sentido en la universidad es algo fundamental. Todas las tecnologías pueden ser bien o mal utilizadas. Eso no es algo exclusivo de ChatGPT y, por lo tanto, creo que las universidades nos tenemos que preocupar no sólo de regular, sino también de formar y asegurarnos de que estas tecnologías sean para el bien común y no se produzcan con ellas más desigualdades, que el acceso no sea diverso para unos y otros. Eso debe comprometernos", afirmó Rosa Devés, bioquímica y primera mujer en asumir la rectoría de la Universidad de Chile, a este medio.
"Puede que la aparición de herramientas de IA como ChatGPT requiera cambios en la enseñanza y evaluación, pero para utilizarla más que para de alguna manera impedir su mal uso. Yo creo que hay que verla positivamente. Usar estas tecnologías de manera que sean vehículos y ver formas de evaluación formativas, que no se centren sólo en los resultados, sino que también en el proceso. Hay que permitir a las personas irse adaptando a aprendizajes nuevos. Si nos obligan a evaluar distinto, bienvenido sea", agregó la líder de la Casa de Bello.
Una visión similar es la de la rectora de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM), Marisol Durán, quien sostuvo que "lo peor que podemos pensar es que ChatGPT es una herramienta para la copia".
"Tenemos que utilizar una herramienta para mejorar y avanzar en el aprendizaje de los estudiantes y eso nos deja un gran desafío. Todos piensan que el alumno va a copiar con el ChatGPT, pero hay que usarlo como una herramienta", añadió la ingeniera.
"El tema del plagio de las tesis y esas cosas es algo que hemos visto hace muchos años. Lo que pasa es que ahora es una disponibilidad gratuita y a la que se puede acceder desde cualquier celular", subrayó en tanto el rector de la Pontificia Universidad Católica (UC), Ignacio Sánchez, quien manifestó además que los docentes siempre tienen mecanismos para detectar plagios.
"Más que tener un estado policial en este tema, yo creo que hay que entender que hoy la información está muy disponible, se puede capturar e instalar de distintas partes, pero lo importante es qué pasa dentro de la persona. Si incorporó la información como conocimiento o sólo copió y pegó", aseguró el médico que hoy encabeza la PUC.
¿qué evaluamos?
Sobre los sistemas de evaluación que podrían empezar a reemplazar a los más tradicionales, como las pruebas escritas, Durán dijo que "es una gran discusión al interior de las reuniones con los académicos. El desafío de las evaluaciones. ¿Qué es lo que queremos evaluar? Queremos evaluar competencias, conocimientos y también hay que ver con qué herramientas queremos evaluar, que va a ser otra de las grandes conversaciones que tendremos en el futuro".
Sánchez, por su parte, afirmó que "las conversaciones orales permiten perfectamente conocer a quién sabe de una patología -refiriéndose a su ámbito, el de la Medicina- y quién se aprendió algo de memoria. Entonces, aquí el desafío es la integración del conocimiento. Tenemos que ir hacia carreras, exámenes y contenidos que permitan realmente integrar conocimientos, cuestionarlos y tener posturas personales del estudiante, hacernos preguntas los profesores y los estudiantes y así tener una resolución de una problemática más en profundidad".
"Necesitamos apelar a la mayor originalidad y también a la presencialidad. Volver a mucha escritura manual, encuentro personal, porque eso al final es algo positivo, que no se puede perder, el encuentro entre el estudiante y el profesor", cerró la autoridad.