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El Vaticano suma a víctima de Karadima a comisión antiabusos
Juan Carlos Cruz aseguró que tiene "una conexión maravillosa" con el Papa, pero agregó que con el nombramiento "a mí no me van a comprar (...) Se necesita justicia".
Leo Riquelme
A través de una llamada telefónica el Papa Francisco le informó el sábado personalmente a Juan Carlos Cruz su decisión de incorporarlo a la comisión vaticana destinada a enfrentar los abusos sexuales en el clero, un drama que el chileno radicado en Estado Unidos sufrió a manos del excapellán de El Bosque, Fernando Karadima, en los '80.
El periodista expresó ayer su alegría por la incorporación y recibió en sus redes sociales miles de mensajes de felicitaciones desde diferentes partes del mundo, donde destacaron su rol en visibilizar y terminar con este flagelo que ha afectado a la Iglesia Católica. Uno de los reconocimientos lo hizo otro de los denunciantes de los abusos del cura de Providencia, José Andrés Murillo.
"¡Que grande! Tu coherencia al defender y luchar por el derecho a vivir una fe libre de abusos es admirable. Cada cual lucha desde su lugar y sé que nunca te has guardado valentía ni claridad en este camino. Admiración por ti", le dedicó por Twitter.
Cruz contó que esta comisión tiene por finalidad asesorar al Papa en proponer fórmulas para evitar los ataques. "A mí me gustaría trabajar también en la ayuda a quien ha sufrido el abuso y en cómo poder reparar", dijo a radio Cooperativa.
El periodista conoció al Papa Francisco en 2018, desde que, dijo ayer, se generó "una conexión maravillosa" con el pontífice. Aseguró que desde ahí han conversado siempre las cosas "al pan pan, vino vino".
"A mí no me va a silenciar nadie (...) Soy el que soy, este no es un esfuerzo de relaciones públicas (...) Yo no he sido comprado por el Vaticano ni tengo el Síndrome de Estocolmo, como algunos han dicho. Yo voy a ayudar", dijo.
Cruz afirmó que uno de los grandes temas en que se debe avanzar es en la lentitud de la que adolece la justicia eclesiástica y en que el clero "colabora poco". A su juicio, la "fatiga mediática" que puede afectar a este drama no debe frenar lo importante, como es que "los responsables tienen que pagar y reparar".
para abril está prevista en Roma la realización de la próxima reunión de la comisión.
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Carabinero que lanzó una bomba lacrimógena al ojo de una estudiante fue condenado a 61 días de prisión
"Siento mucha pena, mucha tristeza y rabia", dijo la víctima ante el fallo judicial.
A casi cuatro años de que una joven de 18 años sufriera la pérdida del ojo izquierdo debido a una bomba lacrimógena lanzada por carabineros en una protesta que se registraba frente a su residencia estudiantil en la comuna de Padre Las Casas, el juzgado de garantía de Temuco condenó a un entonces funcionario de Fuerzas Especiales, el hoy suboficial en retiro Rafael Leal, a 61 días de presidio como culpable del delito de lesiones graves culposas.
La investigación corroboró que el imputado realizó al menos nueve disparos contra el hogar mapuche, dos de los cuales los dirigió hacia el techo, donde estaba la víctima, la alumna de la carrera de Artes Visuales de la U. Católica de Temuco, Fabiola Antiqueo.
A dicha sentencia se llegó tras un juicio abreviado que consintieron todos los involucrados, incluido el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH). Esto implicará que cumplirá su pena en libertad.
"(Estoy) bastante decepcionada de la justicia. Siendo que han habido tantas violaciones a los derechos humanos, no puedo creer que a pesar de que el carabinero reconoció culpabilidad sólo le den 61 días. Esos días no se comparan con la mutilación de un órgano", dijo Antiqueo, según consignó radio Cooperativa. "(Siento) mucha pena, mucha tristeza y rabia", agregó.
El fiscal Raúl Espinoza dijo que la pena fue consentida por el abogado de la víctima. Pese a ello, Antiqueo afirmó que recurrirá a la Suprema y a cortes internacionales.
9 disparos lanzó el suboficial en retiro en una protesta en 2017 en una residencia. Dos fueron al lugar en que estaba la víctima.
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Detectan PCR falsificados para ingresar al país
Los fiscalizados fueron enviados a una residencia sanitaria, incluidos 5 niños.
Una fiscalización en el aeropuerto de Santiago detectó a 22 personas provenientes de Puerto Príncipe con exámenes PCR falsificados, cuya existencia es una exigencia sanitaria para ingresar a Chile en medio de la pandemia.
Según informó la Policía de Investigaciones (PDI), los funcionarios de la Secretaria Regional Ministerial (Seremi) de Salud y los detectives apostados en el terminal pidieron la documentación a los viajeros de un vuelo de la aerolínea Sky. El escaneo al código QR arrojó que los papeles correspondían a identidades que no se condecían con la de los portadores. En el grupo habían cinco niños.
El jefe del Departamento de Inspección Secundaria Aeropuerto, subprefecto Henry Cerda, contó que la Fiscalía de Pudahuel ordenó dejarlos en libertad a la espera de la citación, dado que tenían residencia en Chile. El oficial añadió que el protocolo considera para estos casos el envío a una residencia sanitaria y la realización de un PCR, mientras que para los turistas se dispone la deportación inmediata.
Cerda agregó que en los controles han detectado varios casos de este tipo.
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Repartidor murió cuando trataron de robarle el vehículo
Un repartidor de encomiendas de 36 años murió ayer tras ser baleado cerca de las 11.30 horas en una esquina de Lo Espejo, donde unos delincuentes trataron de robarle el vehículo. El chofer y padre de tres hijos se negó y aceleró para huir del atraco, pero uno de los asaltantes le disparó. El tiro le impactó en el tórax. Un compañero que viajaban con él lo llevó de urgencia a un consultorio de alta resolución, donde falleció.