Diego Gotelli C.

Las calles vacías en las ciudades durante las cuarentenas supusieron una alegría para los automovilistas aburridos de los tacos, pero representaron un mayor riesgo para los ciclistas.

Así lo creen en la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (Conaset), organismo que afirma que ese escenario propició, en parte, un aumento de muertes de ciclistas en accidentes de tránsito. Entre enero y septiembre contabilizaron 85 decesos de usuarios de bicicleta, un 28,8% más que igual lapso del 2019.

Johanna Vollrath, secretaria ejecutiva de Conaset, explica que la baja movilidad que hubo en los meses de confinamiento hizo que los automovilistas circularan más rápido, excediendo la velocidad reglamentaria, e incluso ignorando las señales de tránsito como las luces rojas.

"Cuando en un accidente de tránsito está la velocidad involucrada siempre la consecuencia es más grave, y muchas veces el más afectado es el más vulnerable, el que no tiene una carrocería que lo proteja", señaló Vollrath.

A este riesgo le suma como factor el alza de ciclistas en las calles en la pospandemia, varios de ellos inexpertos.

Para frenar esta tendencia, la unidad se reunió ayer con diversos ministerios para coordinar acciones que reduzcan las muertes viales relacionadas a la velocidad. Considerando todos los modos de transportes, este año van 372 decesos por esta causa, en 5.314 siniestros.

Entre los acuerdos destaca un aumento de fiscalización de velocidad en las calles por parte de Carabineros, además de iniciar una campaña de convivencia vial y reforzar las capacitaciones a los conductores. Asimismo, se agilizará la tramitación de la ley CATI, que promueve recursos tecnológicos para fiscalización de la velocidad.

"Nuestro principal foco está puesto en la protección de los modos más vulnerables en las calles", señaló la ministra de Transportes, Gloria Hutt.

mayor fiscalización Para reducir los decesos viales el Gobierno anunció más controles de velocidad por parte de Carabineros.