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Filadelfia: la familia del asesinado pidió ambulancia, no a la policía
EE.UU. vive otra vez días de violencia gatilladas por el crimen de un afroamericano.
Agencia AP / Leo Riquelme
Dos jornadas de protestas raciales, violencia callejera y saqueos se han vivido esta semana en varias ciudades de Estados Unidos, cuyo ambiente se enardeció por una nueva muerte de un afroamericano a manos de la policía, esta vez en un hecho ocurrido en la tarde del lunes en Filadelfia.
Según la policía, Walter Wallace Jr., de 27 años, empuñaba un cuchillo e ignoró las órdenes de tirar el arma antes de que los agentes le disparasen. Sin embargo, sus padres contaron en la noche del martes que los uniformados sabían que su hijo pasaba por una crisis porque habían estado en la casa de la familia en tres ocasiones el lunes.
"(Una de las veces) se pararon allí y se rieron de nosotros", dijo la mamá de la víctima, Cathy Wallace.
La familia aseguró que llamaron al número de emergencias 911 solicitando una ambulancia para que atendiera la salud mental del joven, no para que enviara a efectivos policiales.
El operativo fue grabado y según las denuncias, Walter Wallace habria recibido unos diez tiros por negarse a dejar el cuchillo.
La Casa Blanca emitió un comunicado pasada la medianoche de ayer afirmando que los disturbios eran otra consecuencia de la "guerra de los demócratas liberales contra la policía" y que el gobierno del presidente Donald Trump "apoya con orgullo a las fuerzas del orden y está listo para desplegar, bajo petición, todos y cada uno de los recursos federales para poner fin a estos disturbios".
La abogada de la familia Wallace, Shaka Johnson, cuestionó las capacidades para atender casos así. "Cuando llegan a una escena donde alguien tiene una crisis mental y la única herramienta que tienen para gestionarla es un arma... ¿son esas las herramientas adecuadas para el trabajo?", se preguntó la defensora.
27 años tenía Walter Wallace Jr., quien el lunes sufrió una crisis mental y terminó baleado.