Diego Gotelli C.

Frente al cerro Santa Lucía dos filas de taxis se toman la pista reservada para las micros. Desde la altura se ven al menos 40 techos amarillos en una cuadra, dejando a cinco buses del Transantiago entre la congestión de autos con poca movilidad. La imagen fue tomada hace algunos años por Juan Carlos Muñoz, director del Centro de Desarrollo Urbano de la Universidad Católica, y da muestra de una práctica que, al parecer, va en aumento: el mal uso que hacen los taxis de las pistas Sólo Bus.

El equipo de Fiscalización del Ministerio de Transportes reveló ayer que en lo que va de año se han infraccionado a 1.492 taxis básicos por uso indebido de la vía para micros en el eje Alameda-Providencia, cifra que supera a los partes cursados en todo el año pasado, cuando se cerró con cerca de 1.100 multas.

Según detalló la jefa del programa, Paula Flores, los partes hacen referencia a taxis que han circulado por la vía sin pasajeros, ya que sólo pueden hacerlo con personas en su interior, y también a casos en que techos amarillos vacíos se quedan estacionados esperando clientes.

"Es algo que pasa a diario, mayoritariamente lo vemos en el centro, a la altura de Estado y Ahumada. Eso provoca que los buses del Transantiago circulen a menor velocidad y también hemos visto hechos donde estos actos provocan accidentes de tránsito", señaló Flores. El seremi de Transportes, Eddy Roldán, profundizó la idea explicando que las micros, al maniobrar para esquivar a los taxistas estacionados, algunas veces han terminado chocando con los vehículos que circulan por las otras pistas.

Para dimensionar el impacto de esta práctica, un estudio de la Universidad Tecnológica Metropolitana midió el uso de los taxis de la vía segregada, concluyendo que el peak se da en Los Héroes, donde en hora punta llegan a representar el 70% de los vehículos que la usan. "Pensábamos que los taxis eran un problema, pero terminamos dándonos cuenta que eran una catástrofe en la Alameda", señaló el ingeniero Álvaro Miranda, autor del estudio.

las vías sólo bus las pueden usar los taxis con pasajeros. Si van a recogerlos, la detención debe ser breve.

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Hoy despega la última aeronave que destinará Chile para el combate de los incendios forestales en la Amazonía. Con este, son cinco los aviones AirTractor (AT802) que destinó el país para colaborar en los siniestros que se concentran en Brasil.

La primera de las aeronaves que voló al territorio está operando desde el 29 de agosto. El domingo despegaron dos más desde Argentina -puesto que fueron arrendadas- y ayer despegó otro desde Santiago. Hoy día será el turno de la última aeronave perteneciente a CONAF. El compromiso inicial es que estas cinco aeronaves estén 30 días disponibles en el sector.

"Vamos a seguir trabajando y apoyando en la medida de la necesidad que tenga la emergencia. El Presidente se ha comprometido a ayudar, proteger y preservar la Amazonía", explicó el ministro de Agricultura, Antonio Walker.

José Manuel Rebolledo, director de la CONAF, señaló que desde la emergencia de incendios que vivió Chile el 2017, lo que más destacaron fue la importancia de la colaboración internacional, ya que "el actual comportamiento de ellos superan, algunas veces, los recursos con que cuenta un país". "Ese compromiso es el que ha impulsado también el presidente Sebastián Piñera y que desde CONAF apoyamos con el conocimiento técnico y preparación que tienen nuestros profesionales", destacó.

"Queremos que no solamente sea una reunión de expertos (COP25), como hay tantas, sino que sea algo que involucre y comprometa a la sociedad chilena entera", fue parte de lo que dijo el Presidente Sebastián Piñera al presentar la Agenda Ciudadana de la COP25. Este programa busca "activar" a la ciudadanía a actuar por la acción climática y a ser parte del cambio, previo a la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático 2019 (COP25) que se realizará en Chile en diciembre próximo.

Para esto, se harán 10 grupos priorizados: gobiernos locales y regionales; los jóvenes y escolares; la sociedad civil y ONG; la comunidad científica y académica; el sector privado; los parlamentarios; el mundo laboral; las comunidades indígenas; los comunicadores y el mundo de la cultura. A través de ellos se busca educar, sensibilizar y movilizar a la ciudadanía.

La agenda va a estar presente en todas las regiones con una jornada masiva en cada una, donde se realizarán festivales familiares de innovación social ambiental.

Además se realizará un Interescolar Nacional Ambiental y un Concurso Nacional de Emprendedores buscará que hagan su aporte para el cambio climático a través de emprendimientos.