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"Erick se va a presentar en la Fiorentina como un jugador de primer nivel"
Uno de sus formadores cree que el jugador de región madura más tarde y que los 4 años en Bologna le han permitido crecer.
Nicolás Labra G.
A sus 67 años, Carlos Cárcamo dice reconocer de forma humilde que ha estado ligado a Antofagasta durante casi toda su vida. Recuerda ver la fundación del club cuando él tenía 15 años, y desde ahí en adelante ha trabajado de cerca con la institución. A cargo de la Sub 15, Cárcamo fue el primero en fijarse en Erick Pulgar, a quien llevó al club "Puma" y ahora lo ve brillar tras ser traspasado del Bologna a la Fiorentina.
"Me parece que fue el 2007 en un campeonato en la Escondida en la Sub 13 o Sub 14. Yo antes lo había visto eso sí, porque él había sido seleccionado en la serie Sub 13 de la selección de Antofagasta y ahí ya teníamos conocimiento de él. En esa selección jugaba con Diego Rojas (formado en la UC y ahora en La Calera)", rememora el formador a hoyxhoy.
Pulgar formaba parte del club Miramar Sur Este y de ahí pasó a las cadetes del club. "Quedó en la Sub 15 de la que yo estoy a cargo. En un principio jugaba de volante central, lo hacía bien. Era más técnico que ninguno de los otros jugadores", añade.
Con Cárcamo estuvo dos años, para después entrenar en la Sub 17 con Víctor Oyarzún y Sergio Marchant en la Sub 19. En 2011 daría el salto al primer equipo nortino. "Gustavo Huerta estaba viendo jugar a las cadetes junto con Víctor Oyarzún, que era encargado de cadetes, y ahí Huerta dijo que le gustó cómo jugaba Pulgar y lo invitó al primer equipo", recuerda.
En ese tránsito adolescente, siempre se movió como volante o, junto con Cárcamo, de defensa central en algunas ocasiones: "Tenía buena anticipación y altura".
Consejos para seguir
En 2013, cuando Pulgar tenía 18 años, un accidente con resultado de muerte estuvo al borde de truncar su carrera. Cárcamo relata cómo fue que el volante salió adelante. "Clave fue el apoyo de su familia, el del club cuando tuvo ese lamentable accidente y tenía problemas para asistir a los entrenamientos. Él se lo merecía porque es una buena persona. Lamentablemente cometió un error, pero el club le dio todo el apoyo", contó.
Pulgar, ratifica el formador, estuvo cerca de retirarse: "Hubo un momento en que él pensó en dejar el fútbol, pero como lo conocíamos de chico teníamos confianza y le decíamos que el fútbol evita muchas cosas externas y él necesitaba el fútbol".
¿Cómo ha visto el salto de Bologna a Fiorentina, su consolidación en Italia en estos últimos cuatro años?
Erick aquí en Antofagasta cumplió una buena temporada y se fue a la UC. Allá también tuvo un buen rendimiento, pero le faltaba el roce internacional que no tenía. En Italia, como se dice, pagó el noviciado, y tuvo que conocer el idioma y la idiosincrasia del italiano hasta madurar poco a poco.
Hay otro caso similar que es el de Ángelo Araos, que está pasando por lo mismo ahora. Está conociendo Brasil (juega en el Corinthians), está conociendo la idiosincrasia, los entrenamientos. Esto es paso a paso. Acá, nuestros deportistas, al ser de provincia, no tienen la posibilidad de estar constantemente jugando partidos internacionales a nivel infantil. El jugador de regiones madura más tarde.
¿Cuál cree usted es el techo de Erick a sus 25 años?
Erick estuvo en los primeros años en Bologna conociendo el fútbol, los entrenamientos, lo táctico que son. Estuvo aprendiendo, maduró allá. Lo llamaron a la Selección y aunque no lo veíamos tan firme, en esta Copa América cambió. Ahí vimos la calidad que siempre ha tenido.
El deportista se analiza en un plazo continuo, necesitan de unos 10 partidos seguidos para medirlo (...) Ya con varios años conoce los jugadores, el sistema de juego y ahora se va a presentar a la Fiorentina como un jugador de primer nivel, no como un jugador novicio.
"En Italia pagó el noviciado, y tuvo que conocer el idioma y la idiosincrasia del italiano hasta madurar."