Diego Gotelli C.

Si reducimos el país a 100 hogares, en 36 de ellos algún miembro de la familia habría sido víctima de un robo o de un intento de robo durante los últimos seis meses, una cifra que pese a representar a más de un tercio de la población se trata del menor índice registrado desde hace ocho años.

El dato fue revelado por una encuesta de seguridad realizada por la Fundación Paz Ciudadana, que cuantificó en 36,4% las familias que dicen haber sido victimizadas hasta septiembre, lo que marca una caída de cuatro puntos porcentuales respecto a igual medición del 2017. Si se mira el historial, en la última década sólo en el año 2010 se obtuvo un índice más bajo (33%).

"Son buenas noticias (...) Es bueno saber que en nuestro país por fin, después de mucho tiempo en que la victimización y el temor crecían, este año están empezando a bajar y esperamos que baje mucho más", celebró el Presidente Sebastián Piñera al inaugurar la "Semana de la Seguridad Ciudadana".

La caída se debe principalmente a la baja en los delitos contra las familias de nivel socioeconómico alto, cuya victimización se redujo de un 46,8 a 37,1%. En los sectores medios se pasó de 41,4 a 36,8% de familias que han sido robadas, mientras que el índice subió entre los más vulnerables, pasando de 33,3% el año pasado a 37,5% en este periodo.

En cuanto a las características de los atracos, los hogares de Santiago fueron más victimizados que los de regiones; la mayoría ocurrieron en la vía pública; y aumentó la proporción de robos violentos, que pasaron de representar el 22,4% de los hechos constatados, a ser el 27,8%.

Al respecto, el Mandatario aseguró que "no nos vamos a dormir en los laureles" y "seguiremos trabajando para devolver la paz y darle mayor seguridad a las familias chilenas".

En otros resultados, el estudio también corroboró un alza en las denuncias, las que subieron de un 55,07% a un 61,23%, lo que para La Moneda significa una mayor confianza en el sistema por parte de la población. De hecho, la encuesta grafica una mayor aprobación a todos los organismos que combaten la delincuencia, a excepción de lo que respecta a la Fiscalía, donde bajó la satisfacción por su actuar a gusto de quienes denunciaron.

Respecto a la inseguridad y el temor, el estudio comprobó la tendencia a la baja presente en los últimos años.

2.050 personas fueron consultadas para la encuesta de seguridad, tanto vía telefónica como presencial.

baja el auto cuidado Las medidas preventivas que pueden aplicar las personas redujeron su índice de uso.

10,4% de los consultados dijo sentir un nivel de temor "alto". Es el índice más bajo de la historia.

El robo de un cajero automático terminó con una sucursal bancaria destruida ayer en Estoril, entre Paul Harris y avenida Las Condes. Sin embargo, lo que más llamó la atención fue que para operar con menos obstáculos, los ladrones colgaron un cable de acero a 50 centímetros de altura a lo largo de 20 metros de calle, amarrado con candados a un poste y a un árbol, para bloquear así el paso de vehículos.

"Es primera vez que veo eso", dijo sorprendido el alcalde Joaquín Lavín, quien llamó a los delincuentes como unos "profesionales".

El atraco ocurrió a las 5.20 horas, cuando llegaron los ladrones en dos automóviles y lanzaron miguelitos en la vía. Luego saturaron con gas el dispensador para hacerlo explotar y sacar el dinero.

"Sentí como un bombazo", dijo una testigo. "Menos mal no había gente", agregó otra, sorprendida por el daño que generó la explosión. En el banco comentaron que la detonación fue tal, que pudo hasta matar a una persona.

Los asaltantes huyeron con las gavetas, pero se sospecha que por las medidas de seguridad de estos aparatos, los billetes estarían entintados e inutilizables.

"Esto fue gigantesco y desproporcionado al monto que un delincuente se puede llevar", dijo el gerente de Scotiabank Chile, Francisco Sardón.

Tras realizarle una serie de exámenes físicos y psicológicos, la congregación católica Schoenstatt confirmó ayer que devolverá a Chile al exobispo Francisco José Cox, sospechoso de cometer abusos sexuales antes del 2002, cuando fue separado de sus funciones en La Serena y fue enviado a una casa de la organización en Alemania.

La idea de sus autoridades es que el exprelado -al que el Papa Francisco le quitó el estado clerical en octubre- responsa a la justicia chilena. Eso ocurriría el próximo año, tras someterse a una microcirugía en el cerebro.

Según los exámenes, padece de diabetes, cáncer a la próstata y demencia senil. "El médico dice que puede viajar a Chile y por lo tanto nosotros hemos también decidido traerlo de vuelta para ponerlo a disposición de la justicia y de lo que se requiera (...) El examen dice que tiene síndrome de demencia senil. Impedimentos no, pero no sé si va a poder ayudar tanto, pero perfectamente se le puede interrogar", dijo el vocero de Schoenstatt, Patricio Moore.

Un hombre de 39 años que estaba realizando labores de limpieza en la avenida Granizo, en Olmué, se cayó a un pozo de seis metros de profundidad y quedó atrapado por casi nueve horas. Para rescatarlo se requirió de una retroexcavadora y un camión pluma, aunque luego ambas maquinarias fueron retiradas del lugar por el riesgo de derrumbe que suponían, debiendo concluir el operativo con trabajo manual.