Leo Riquelme

La Universidad Católica informó ayer que el arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, decidió delegar sus funciones como Gran Canciller de la casa de estudios. Su determinación se comunicó dos días después que anunciara que no oficiará el Te Deum de Fiestas Patrias ante los pedidos de diferentes autoridades que veían que era inconveniente que encabezara la ceremonia alguien investigado por presuntos encubrimientos de abusos sexuales en la diócesis de Rancagua.

Según el comunicado, el prelado tomó la decisión el viernes, "a la luz de las altas exigencias que la conducción de la arquidiócesis está demandando, considerando la designación de cuatro de sus obispos auxiliares como administradores apostólicos de cuatro diócesis vacantes".

Quien lo reemplazará será el vicecanciller Tomás Scherz. Este cargo es el de máxima autoridad en las universidades católicas, aunque no se relaciona con lo académico, sino en sus relaciones con el Vaticano y de defensa de la educación de origen religioso.

En los últimos meses las diócesis de Osorno, Puerto Montt, Talca, Valparaíso y Rancagua han sido intervenidas por el Vaticano, afectadas por denuncias de abusos sexuales. Aunque todos los obispos presentaron sus renuncias, víctimas de los ataques han endurecido sus llamados al Papa Francisco para que acepte la salida de Ezzati, quien fue llamado a declarar ante la fiscalía de O'Higgins en calidad de imputado.

"Él ya ha perdido autoridad. Hace mucho tiempo que no tiene autoridad de pastor, no puede ejercer como pastor, ya no está ejerciendo como pastor, por eso que sería bueno un cambio lo antes posible", dijo a radio Cooperativa el jesuita Felipe Berríos.

El Gobierno comentó la decisión de Ezzati de marginarse del acto de septiembre. "Valoramos el gesto, porque el sentido profundo del Te Deum es el reencuentro de los chilenos (...) y cualquier otro hecho que pudiera opacarlo no sería positivo", dijo la vocera Cecilia Pérez.

Cadem reveló una encuesta en que sólo el 19% aprueba el actuar de la Iglesia, cinco puntos menos que en julio. De Ezzati, en tanto, apenas el 14% tiene una evaluación positiva, 20 puntos menos que lo que registraba el 2015.

El Presidente Sebastián Piñera firmó las indicaciones al proyecto de cambio en el sistema de financiamiento de las Fuerzas Armadas, que sería el fin de la ley reservada del cobre, que data de 1958.

La iniciativa fue presentada en su primer Gobierno, el 2011, ya fue aprobada por la Cámara de Diputados y hoy duerme en el Senado. Con los cambios, el Ejecutivo pretende agilizarla. Ayer, parlamentarios oficialistas y de oposición expresaron su apoyo a la reforma.

En lo medular, el mecanismo mantiene el financiamiento regular vía presupuesto para el funcionamiento ordinario de estas instituciones, pero modifica el destinado a fines estratégicos, como la compra de material, que dejará de ser a partir del 10% de las ventas anuales de Codelco, que es de difusa fiscalización.

En su lugar se creará un mecanismo que contendrá un 70% de lo aportado como promedio desde 2010 y se confeccionará cada cuatro años. A ellos se sumará un Fondo de Contingencia Estratégico que va a contar con un monto inicial de US$1.000 millones.

"Es un mecanismo más transparente, más eficiente, con un control democrático de las inversiones", dijo Piñera. "Existe la voluntad de avanzar porque es una demanda del mundo democrático", agregó el presidente del PS, Álvaro Elizalde.