Leo Riquelme

En más de diez puntos aumentó la cantidad de comerciantes del Gran Santiago que ha sido víctima de la delincuencia, según arrojó la XVII Encuesta de Victimización del Comercio, realizada por la Cámara Nacional de Comercio (CNC), dada a conocer ayer.

En el segundo semestre del 2017 el 62,2% de los locatarios capitalinos dijo que sufrió un delito, mientras que doce meses antes fue el 51,5%.

El dato santiaguino está casi tres puntos por encima del promedio nacional, que llegó a 59,3% y es el más alto desde que se realiza la medición, que partió el 2008. El antecedente local sólo fue superado por el 66,7% que experimentaron los comerciantes de Viña del Mar y Valparaíso.

"Estamos muy preocupados por la significativa alza y hacemos un enérgico llamado a las autoridades a hacerse cargo de una vez por todas de este tema. Este aumento da cuenta de la facilidad que tiene el agresor para delinquir, incluyendo las bajas penas que recibe en caso de ser capturado", lamentó el presidente de la CNC, Manuel Melero.

Uno de cada cuatro comerciantes del Gran Santiago aseguró que sufrió un hurto o un robo hormiga, los ilícitos más habituales en la zona y que gran parte de los encuestados dijo haberlo vivido en más de una vez. Sólo en el 11,5% de los casos enfrentó un robo con violencia.

Al igual que en la medición anterior, seis de cada diez de las víctimas reconoció que no denunció lo ocurrido. La mitad afirmó que no lo hizo porque no sería tomado en cuenta por tratarse de montos muy pequeños. El 35% planteó que no tenía sentido hacerlo, pues "es perder el tiempo", porque los organismos persecutores "no hacen nada". En el Gran Santiago eso fue respondido por el 41% de los afectados.

"Desde el punto de vista del potencial delincuente, existe una baja posibilidad que sea detectado, que lo atrapen y que lo condenen, y en caso que lo hagan, difícilmente cumplirá su condena. Ante este escenario nos cuestionamos qué eslabón de la cadena de instituciones responsables está siendo negligente en su labor de prevención y combate de la delincuencia", agregó Melero.

Además, el 63% de los capitalinos siente que el barrio donde está su negocio es "nada" o "poco seguro". Esto aumentó respecto al 61,3% del año anterior.

En Santiago también el 44% de l os encuestados dijo que aumentó las medidas de seguridad para evitar la delincuencia. Las más masivas en el país fueron la instalación de cámaras de vigilancia (68,6%) y la habilitación de alarmas (55,2%). En ambos casos el 88,2% las calificó como "muy eficientes" para el objetivo.

el 57,2% de los comerciantes de Santiago perciben que los ladrones están más violentos.

el 58,1% de los locatarios del nororiente de la capital perciben más seguridad en sus barrios. En el resto se sienten inseguros.