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Cuando un accidente altera el curso de las cosas
por katherine salosny / @kathysalosny
No recordaba la última vez que tuve un accidente. El que sufrí la semana pasada me dejó al comienzo en shock, porque en realidad nadie espera sufrir un accidente así: por estar con las manos ocupadas, cuando la Sol, mi perrita que adoro se me cruzó corriendo, volé por los aires. Caí muy mal.
Y acá estoy, en reposo y recuperándome de una caída que nunca me imaginé podía tener las consecuencias que tuvo: dos fracturas en el pie y una en la mandíbula. Y es que los sucesos imprevistos alteran totalmente tu vida, especialmente cuando te dejan lesiones corporales como éstas.
Debo reconocer que los accidentes son eso ¡Una acción inesperada!
Cuando superé el shock de la doble operación, lo que me pareció más importante y que quería compartir con ustedes es que no sólo me vi obligada a parar, sino que también a cambiar el ritmo de vida y a pedir ayuda.
Es lo que estoy practicando ahora que estoy mucho mejor, que todo ha ido saliendo bien, pero que no puedo apoyar bien el pie derecho y puedo comer solo cosas blandas. Es increíble todo lo que puede pasar cuando uno se ve limitado en sus movimientos y depende de otras personas para funcionar.
Con esto no sólo empatizas con todas las personas que están en tu misma situación, sino que además empiezas a cultivar la paciencia y a observar con otros tiempos la vida. Para mí ha sido un gran ejercicio: tener paciencia cuando no todo sale como estoy acostumbrada, darme los tiempos para recuperarme y entender que solo entregándome y aceptando que estoy limitada por unos días es que empieza la recuperación con las indicaciones médicas.
Confieso que este tema me afecta bastante. Toda la vida he sido una persona muy activa y deportista, por lo que se imaginarán lo que significa quedarme quieta y no poder volver aún a una vida activa como la que siempre he tenido y me gusta tener.
Pero sobre todo, este espacio quería ocuparlo para agradecer a tanta gente que me ha enviado mensajes increíbles de apoyo, parabienes, cariño y afecto a través de las redes sociales y que no deja de sorprenderme. Por ello, además este tipo de situaciones te hacen ver cómo tanta gente está pendiente de ti y te lo expresan. Así es que ¡gracias a tod@s!
Desde el primer día, cuando se empezó a saber de mi accidente, todos mis amigos se hicieron presente de distintas formas y esa energía de verdad se siente y pucha que ayuda para levantar el ánimo y empezar la recuperación.
Y por supuesto, no puedo dejar de mencionar a los médicos y las personas de la clínica donde me atendieron y especialmente a mi mamá y hermana, que se turnan para acompañarme y ayudarme en este etapa.
Ahora estoy aprovechando de disfrutar septiembre, mes donde vemos cómo la naturaleza florece y los días empiezan a ser más tibios.
Como dijo alguna vez Cerati, cuya partida recordamos por estos días, "Gracias totales" por el apoyo y las buenas vibras para recuperarme.
"Acá estoy en reposo y recuperándome de una caída con consecuencias que nunca imaginé: dos fracturas en el pie y una en la mandíbula."
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Estos juegos típicos son perfectos para divertirse en el patio
Tradiciones como la rayuela, la gymkana y el trompo son fáciles de practicar y favorecen una vida sana para niños y adultos.
N.E.
Todos hacen asados, toman vino y terremotos, escuchan y bailan cueca y comen empanadas, pero una buena alternativa para celebrar a Chile, y que a veces se olvida, es desempolvar los juegos tradicionales. Sin duda, una actividad apta para toda la familia.
Si bien entre estas tradiciones hay varias que requieren bastante espacio, hay otras que se pueden realizar en un pequeño patio o en una terraza. Tal es el caso, por ejemplo, del trompo, el emboque y la payaya. En un sitio un poco más grande también se podría hacer una carreras de sacos, la gymkana, tirar la cuerda, encumbrar volantines y la rayuela (considerada un deporte).
De acuerdo al profesor de Educación Física de la Universidad Andrés Bello, Cristián Vásquez, practicar estos juegos es muy beneficioso. "La rayuela ayuda a desarrollar la concentración y la coordinación. La gymkana, en tanto, tiene mucha práctica de parámetros psicomotrices como el equilibrio y tirar la cuerda ayuda a aumentar la fuerza. Las carreras de sacos tienen beneficios en el patrón motor básico del salto", explicó.
Asimismo, añadió que los más favorecidos por este tipo de prácticas son los niños, puesto que "es difícil que los adultos mejoren los patrones motores y psicomotrices, ya que éstos están establecidos por los estímulos que tuvimos en su infancia".
¿qué se necesita?
De los juegos típicos el único que requiere una preparación más allá de reunir ciertos objetos y/o comprar elementos y tener pasto o un suelo liso es la rayuela. Sin embargo, armar un cajón de rayuela casero es sencillo. "Se necesitan cuatro tablas de madera de 80 centímetros de largo. Se crea un cuadrado uniendo las tablas con clavos en cada una de sus esquinas. Una vez que se tiene la base, se ubica donde quedará fija y se rellena con arena húmeda o de consistencia barrosa. Finalmente, se clavan dos clavos en la mitad de las tablas -a los 40 centímetros- y se les amarra una pita que quede tensa. Para jugar se necesitan tejos, que pueden ser cualquier objeto circular que pese un kilo", sostuvo Vásquez.
Algunas precauciones
El prevencionista de riesgos, Francisco González, sostuvo que a la hora de practicar juegos típicos en casa es fundamental fijarse en que no haya objetos cortopunzantes en la superficie que se ocupará, y asegurarse de que no hay elementos pesados que puedan caerse en el área de juego o sus alrededores. "También es importante revisar que el suelo esté liso y, si se trata de pasto, que éste esté más seco que húmedo", agregó.
Para encumbrar volantines, en tanto, la académica de Enfermería de la Universidad San Sebastián, Ingrid Toro, insistió en que lo más importante es evitar el uso de hilo curado. Aunque tampoco recomienda los de nylon, debido a que también pueden causar heridas por roce o manipulación.
preparar el lugar que se utilizará para jugar es fundamental para evitar accidentes.