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Hace tiempo en recursos humanos se habla del engagement como una potente herramienta de gestión, que ayuda a aumentar el bienestar de las personas en el trabajo y asegurar su compromiso. Las empresas se esfuerzan cada vez más por generar las condiciones que aseguren que sus colaboradores mantengan alto índices de engagement.

Una mirada efectiva debe incluir las condiciones nocivas, es decir, trabajos desagradables y que no son capaces de mantener la activación y el entusiasmo. Por esto, tan importante como monitorear el engagement es mapear los niveles de agotamiento (fatiga crónica y extrema), para que sea posible identificar e intervenir a quienes trabajan en condiciones que han llevado al desgaste excesivo.

¿Por qué es importante detectar tempranamente a equipos con altos niveles de agotamiento, que es de las condiciones más relevantes que conducen al síndrome del burnout? Quienes lo experimentan se sienten sobrepasadas por las exigencias y llegan a sentirse "fundidas". Sienten que el trabajo le desagrada a nivel extremo y se desconectan a nivel mental y emocional de sus responsabilidades.

Las condiciones que llevan al agotamiento excesivo, pérdida de confianza y desinterés por el trabajo producen graves daños a nivel personal y organizacional, por lo que impactan negativamente en la productividad, con mayor ausentismo (licencias médicas) y un desempeño deficiente o descuidado.

Para asegurar un ambiente de trabajo óptimo para el engagement es necesario contar con un entorno laboral estimulante y atractivo, que entregue herramientas para enfrentar exigencias desafiantes y novedosas, pero con espacios de recuperación para asegurar que el nivel de agotamiento pueda ser administrado. Si bien el trabajo necesariamente desgasta a las personas, el monitoreo y el aseguramiento de espacios de recuperación entre jornadas y entre semanas puede ser un aliado para evitar que se genere un agotamiento excesivo.

Innovum Fundación Chile integró a su medición de engagement una medida del nivel de agotamiento de los equipos de trabajo. Los resultados de las empresas medidas el 2016 (más de 9.500 personas) indican que entre quienes están agotados y quienes están en riesgo de estarlo, suman un 30% del total.

Las condiciones de vida actuales, donde los límites entre el mundo del trabajo y la familia son difusos y los horarios cada vez más extendidos, hacen que el problema del agotamiento se ubique en una posición de mayor relevancia en la estrategia de gestión de personas de cualquier organización, y muy especialmente cuando se aspira a mantener o aumentar su productividad.

"Si se busca asegurar el bienestar de los equipos de trabajo, pero orientado a la productividad (...) (hay que) evitar altos niveles de agotamiento de los equipos."

Felipe Gómez

La de ayer se había anticipado como una jornada agitada en las calles del centro de Santiago. Apenas se anunció la presencia del "Bus de la Libertad", que rechaza la enseñanza en colegios de la tolerancia sexual, el Movilh respondió anunciando el "Bus de la Diversidad".

Y aunque el Gobierno modificó el recorrido de este último, en palabras de la vocera Paula Narváez, "para que los dos buses no se toparan generando manifestaciones contrarias a la seguridad de las personas", igual se produjeron incidentes entre promotores y detractores afuera de La Moneda y en el Parque Forestal, dejando un saldo de 35 detenidos y un carabinero lesionado, según informó la propia institución.

Acusaciones cruzadas

En el balance de la primera jornada de tránsito del "Bus de la Libertad", Marcela Aranda, representante del Observatorio Legislativo Crisitiano y una de las promotoras de la iniciativa en Chile, calificó como "un éxito" el paso del bus por el centro de Santiago.

Sin embargo, acusó incumplimiento del acuerdo con la autoridad. "Hoy teníamos el compromiso de dar tres vueltas y después compartir con los adherentes , pero fuimos engañados porque personal de Carabineros nos dijo que recibió una orden para sacarnos", explicó.

Sobre los incidentes protagonizados por sus adherentes y contramanifestantes, dijo que "aquellos que enarbolan la bandera de la tolerancia, hoy no lo fueron, lo mismo la ministra Paula Narváez".

Desde el Movilh, anunciaron una querella contra Aranda "y la organización que representa, por injurias y delitos de odio". El activista Rolando Jiménez explicó que el objetivo de las contramanifestaciones eran "evitar que el bus del odio recorra la vía pública impunemente". Agregó que el Gobierno les bloqueó el paso, cuando "lo único que queríamos era recorrer las calles de Santiago detrás del bus del odio. Era una manifestación pacífica que iba a contrarrestar un mensaje de odio, de homofobia (...) La conquista de nuestros derechos no afecta a terceros", dijo a 24 Horas.

Para hoy, ambas entidades anunciaron que continuarán con sus recorridos.

"bus de la libertad" hoy recorrerá tres comunas y el miércoles va a Valparaíso. El del Movilh también circulará.

jorge sabag Diputado DC negó que Marcela Aranda sea su asesora, pese a que así la presenta en al menos dos veces el sitio del Senado.

Dos turistas chilenos fallecieron el fin de semana en Lima en un accidente protagonizado por un bus turístico que hacía un recorrido en el cerro San Cristóbal de la capital peruana. Se trata de Osvaldo Encina y Johana del Pilar Soto, quienes son parte de una lista de nueve fallecidos. El volcamiento del bus dejó además a 30 personas heridas, entre las que se cuentran otros cuatro turistas chilenos. De acuerdo a lo consignado ayer por radio Cooperativa, los trámites de rigor quedaron a cargo del cónsul chileno Samuel Ossa, mientras se esperaba el arribo de los famliares. Hasta anoche, de acuerdo a lo informado por radio Bío-Bío, las autoridades peruanas investigaban a través de exámenes dactilares, si un tercer chileno se encontraba entre las personas fallecidas.

El Ministerio Público de Venezuela solicitó ayer la revisión de la medida de arresto domiciliario que pesa sobre el chileno-venezolano Braulio Jatar, para que se decrete a su favor la medida cautelar sustitutiva de libertad, fundamentado en razones de salud. Jatar, de 58 años de edad, había sido detenido el 3 de septiembre del año 2016 y permaneció ocho meses en prisión hasta que se le permutó la cautelar por arresto domiciliario.