Leo Riquelme

Desde 1999, cuando 15 niñas del Liceo 1 de Santiago lanzaron a través del transbordador Columbia unas chinitas para conocer su comportamiento en un ambiente sin gravedad, que la ciencia chilena no realiza experimentos en el espacio. Eso cambiaría a partir de hoy, pues anoche se aguardaba el lanzamiento en India del Suchai, el primer nano satélite desarrollado y financiado íntegramente por la U. de Chile, abocado a la experimentación científica.

"Estamos emocionados, esperanzados y con hartas horas de sueño faltante", contó el investigador del programa espacial de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, Carlos González.

El Suchai requirió US$300 mil para su desarrollo y lanzamiento, aportados por la facultad. Es un cubo tipo Rubik de 10 centímetros que viajará por el planeta a una velocidad de 7 km por segundo. "Pasará entre cinco a tres veces al día por Santiago", agregó.

El aparato está programado para realizar tres experimentos. Uno es estudiar el comportamiento de circuitos electrónicos, como chips de celulares, en el espacio. Otro es un medidor de plasma y atmosférico, para el cual desarrollaron una bola de un centímetro de diámetro que saldrá 5 cm del cubo para tomar muestras de ionósfera, donde se producen las auroras y boreales y que es afectada por las tormentas solares.

También lleva una cámara de baja resolución, menor a la de un celular, que espera captar una imagen cuando se desprenda del cohete.

Aunque en el equipo asumen el riesgo que existe, ya se dan por satisfechos por el desarrollo científico, tecnológico y de capital humano que ha permitido para la universidad y el país. De hecho, ya trabajan en el Suchai II y III, pero esta vez financiado con recursos del Estado.

Si todo resultaba bien, hoy los encargados trabajarían en el enlace con el satélite, que será controlado totalmente desde la institución. Su vida útil se estima en seis a 12 meses. Luego, se espera que sirva a la comunidad radioaficionada y que se mantenga con un sentido escolar.

la isla de sriharikota Ahí despegaría el cohete de la Agencia de Investigación Espacial de la India anoche.

Miles de personas acompañaron ayer el funeral en la ciudad de Cincinnati, en Ohio, del joven estadounidense Otto Warmbier, quien estuvo preso durante 17 meses en Corea del Norte, donde los tribunales lo condenaron a 15 años de trabajos forzados por intentar robarse un cartel de propaganda política mientras turisteaba en Pyongyang. Warmbier falleció a principios de semana, días después de que el régimen de Kim Jong Un autorizara su salida y luego de permanecer un año en estado de coma. Muchas personas concurrieron ayer al instituto de educación secundaria Wyoming, donde se efectuó una ceremonia en nombre del joven que se graduó en ese establecimiento el 2013.

Como "mártires de la reivindicación marítima" de su país calificó el Presidente de Bolivia, Evo Morales, a los nueve bolivianos condenados en Chile el miércoles, luego que fueran detenidos en marzo por contrabando, robo con violencia y tenencia ilegal de armas. A juicio del Mandatario, los aduaneros y militares altiplánicos fueron sentenciados como una forma de "vengarse" por la demanda de su país ante La Haya. Morales insistió en la inocencia de los condenados, que fueron expulsados de Chile. La defensa dijo que no apelará.

El Presidente venezolano Nicolás Maduro ordenó reparar a las víctimas de las protestas, y que han dejado 74 muertos en tres meses. El Mandatario no entregó más detalles pero hizo el anuncio tras condenar la muerte del universitario Fabián Urbina, de 17 años, quien recibió un disparo de bala en el tórax en una manifestación en Caracas. Por ello hay tres policías detenidos. Además, Maduro le pidió "equilibrio" a la fiscal general, Luis Ortega, que ha cuestionado su actuar.