por álvaro peralta / @dontinto

Salvo contadas excepciones, a los padres nos gusta la carne. A la parrilla, al horno, en sartén vuelta y vuelta, adentro de un sándwich, en un crudo… prácticamente en todas sus versiones. Además, por lo general también nos gusta lo que suele rodear a los escenarios de todos estas formas de comer carne. Es decir, amamos los asados, las visitas a nuestras fuentes de soda regalonas, a una buena parrilla o -por qué no- al estadio, donde -aunque con cada vez más dificultad- aún se pueden degustar por ahí ricos sándwichs de mechada, jamón palta y hasta potito.

Por todo lo anteriormente expuesto, cae de cajón que enfrentados al Día del Padre, una buena forma de agasajar a los progenitores es con algo cárneo. Claro, porque dudo que algún padre rechace este domingo una buena carne cocinada por sus hijos o hijas. O incluso más, esta fecha también puede transformarse en una excelente oportunidad para cocinar en familia. De esta forma, uno puede tomarle la mano a ciertos secretos que los mayores suelen tener a la hora de enfrentarse a la cocina o la parrilla y, por otro lado, también podemos aprovechar de actualizar a los queridos veteranos con una que otra técnica de cocción que puede que no conozcan. Así, entre todos, el almuerzo de este domingo puede quedar muy bueno y con un proceso previo más que entretenido.

Claramente el Día del Padre es una ocasión para irse a la segura a la hora de festejar al progenitor. Por lo mismo, no es el momento para introducir a nuestros padres en estilos de comida que nunca han visto ni en nuevas formas de alimentarse. Me explico: si el señor en cuestión nunca ha probado -por ejemplo- la comida japonesa, este domingo no es el mejor momento para dársela a conocer. Porque corremos el riesgo de que si no le gusta, no lo pasará bien. Además, hay que tener bien claro que el festejado es él y no uno, así que ojo al momento de elegir tipos de carne, recetas, vinos, destilados y más. Siempre pensando en el homenajeado y no en el resto. Total, a estas alturas hasta las mascotas de la casa tienen su día; así que a cada uno le llega su momento de felicidad. Y desde acá, una propuesta cárnica clásica y segura del gusto de cualquier papá, aunque con cierta dificultad que requiere comenzar con la preparación el día antes… para que se note el cariño.

"Hay que tener bien claro que el festejado es él y no uno, así que ojo al momento de elegir tipos de carne, recetas, vinos, destilados y más."

Ojo con las ofertas

Durante esta semana suelen aparecer en el mercado convenientes ofertas de vinos, destilados y cervezas. No es malo aprovechar la ocasión para adquirir algún buen presente para nuestros padres y -de paso- también algo para nuestra despensa personal.