Leo Riquelme

Con abrazos, apretones de mano, niños cantando, objetos simbólicos y autoridades de diversos países, el gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC firmaron ayer un acuerdo de paz, que pone fin a 52 años de conflicto.

"Miembros de las FARC, hoy, cuando emprenden su camino de regreso a la sociedad, cuando comienzan su tránsito a convertirse en un movimiento político sin armas, siguiendo las reglas de justicia, verdad y reparación contenidas en el acuerdo, como jefe de Estado de la patria que todos amamos, les doy la bienvenida a la democracia", dijo el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos.

"Que nadie dude que vamos hacia la política sin armas, preparémonos todos para desarmar las mentes y los corazones", respondió el líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Rodrigo Londoño, alias Timochenko.

"En nombre de las FARC-EP ofrezco sinceramente perdón a todas las víctimas del conflicto por todo el dolor que hayamos podido causar en esta guerra", añadió.

La ceremonia de Cartagena de Indias fue transmitida a todo el mundo. En ella hubo objetos simbólicos. Por ejemplo, el bolígrafo con el que se selló el acuerdo fue fabricado con una bala y Santos le obsequió a Timochenko un prendedor bendecido por el Papa Francisco.

A la cita acudieron 2.500 líderes, como el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry; el jefe de la ONU, Ban Ki-moon; el Presidenta de Cuba, Raúl Castro, y su par de Chile, Michelle Bachelet; además de víctimas del conflicto.

Las FARC cuentan con unos 7 mil guerrilleros, pero su abandono definitivo de las armas comenzará a producirse sólo si triunfa el "Sí" en un plebiscito que se celebrará este domingo. Éste considera incluso la posibilidad de dirigentes de la guerrilla a competir en cargos de elección popular. Eso sí, los dirigentes de las FARC deberán confesar todos sus crímenes ante un tribunal especial.

Según todas las encuestas, la aprobación al referéndum cuenta con el favoritismo, a pesar de que uno de sus principales detractores es el popular ex Presidente Álvaro Uribe.

"Este no es un acuerdo imperfecto, es una claudicación de la democracia colombiana al terrorismo (...) Ustedes en Chile nunca le permitirían a un responsable criminal de reclutamiento de niños y de violación de mujeres ser elegido o tener impunidad total. Las FARC son responsables del reclutamiento de 11.700 niños y de la violación de 6.800 mujeres", dijo a radio Cooperativa.