Nicolás Labra G.

Accidentada fue la llegada de los hinchas albos a Arequipa, ya que varios de ellos fueron detenidos por realizar disturbios en el centro de la ciudad. En la cancha, José Luis Sierra -presionado por obtener un resultado positivo que los mantuviera con vida en la Copa Libertadores- sorprendió dejando en el banco a Martín Tonso y poniendo a Luis Pedro Figueroa.

Poco ritmo

El primer tiempo de Colo Colo dejó varios puntos para el análisis. Primero, pese a que le costó los primeros 15 minutos, de ahí en más tomó el control y fue dominador de las acciones. De hecho, la opción más clara vino gracias a Jaime Valdés, quien a los 21' reventó el travesaño de Daniel Ferreyra, quien estaba absolutamente vencido.

Cinco minutos más tarde, Pajarito la volvió a recibir desde el centro e intentó con otro tiro de larga distancia, aunque este se fue desviado por bastante. De allí vino el primer error albo: en cinco minutos -del 28' al 33'- Esteban Pavez y Claudio Baeza fueron amonestados, dejando a los dos volantes de corte condicionados para el resto del encuentro.

Del resto del equipo, poco que mencionar porque el aporte fue casi nulo. Jean Beausejour se vio permanentemente superado y fue el más débil de la defensa. Y es que Alexander Sánchez fue el mayor dolor de cabeza para los albos y la principal carta ofensiva de Melgar.

Por la derecha, Gonzalo Fierro se preocupó más de defender y nunca subió para generar superioridad con Figueroa. Eso sí, el capitán albo cerró el primer lapso con un buen tiro de media distancia rechazado por Ferreyra.

Paredes, el salvador

A los tres minutos del segundo tiempo vino el descalabro. Cayó un pase largo y en un error digno de Los tres chiflados ni Beausejour ni Zaldivia la despejaron y el argentino Bernardo Cuesta les ganó la posición poniendo el increíble 1-0.

De allí en más Melgar agarró confianza, y tuvo otra clara con Omar Fernández, quien desvió a los 53' cuando encaraba solo a Garcés. Sierra reaccionó y mandó a la cancha a Javier Reina y Martín Tonso. Además, soltó a los laterales y el efecto fue inmediato. Beausejour ganó presencia, mejoró su nivel, y a los 68' sirvió un centro preciso que Paredes conectó desde la derecha. 1-1 y revivían las ilusiones albas. A los 72' se repitió la fórmula: centro de Beausejour y Paredes la agarró con un tiro raso. Era el 2-1 final.

Y los hinchas albos, que se hicieron sentir y apoyaron como si fueran locales, se fueron felices. Ahora Colo Colo depende de sí mismo: un triunfo el jueves ante Independiente del Valle en el Monumental lo clasifica a los octavos de final.

Paredes es el segundo máximo artillero chileno en la Libertadores con 18 goles. Colo Colo se juega la clasificación ante Independiente del Valle el jueves en Santiago.

Atlético Mineiro e Ind. del Valle tienen 10 puntos, Colo Colo 8 y Melgar 0.

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