A Jorge Sampaoli no le importa nada. Ni la crisis que vive la ANFP, ni los líos contractuales de su cuerpo técnico (ver nota secundaria), ni siquiera el hecho de estar de vacaciones. Ajeno a toda polémica, el entrenador ya está trabajando para afrontar de la mejor manera los próximos desafíos de la Selección.

Y es que las salidas de Sebastián Beccacece, Nicolás Diez y Francisco Meneghini dejaron más que diezmado el equipo de trabajo del casildense y su principal misión por estos días es conformar un nuevo grupo para llevar las riendas de la Roja.

"No es fácil rearmar el grupo después de 14 años trabajando con una persona y cuatro años con un cuerpo técnico en la Selección que más o menos teníamos todo bien distribuido. Se hace complicado reestructurarlo", comentó Sampaoli a ESPN.

El casildense, lejos de amedrentarse por su separación con Beccacece, aseguró que "son situaciones que te hacen crecer como entrenador". Además, admitió que "sabía que Sebastián se iba a ir después de Copa América" y señaló que su reemplazante será "la persona idónea". Recalcó que debe tener mucha experiencia y capacidad.

Aunque no soltó nombres, dijo que ya entrevistó a algunos candidatos y que "está la posibilidad de concretar situaciones que tengan que ver con la necesidad de tener un cuerpo técnico muy grande, que esté todo el tiempo analizando y tratando de encontrar respuesta a la necesidad del protagonismo".

Esto viene a reafirmar las ganas del entrenador de quedarse en su actual puesto, sobre todo pensando en las Clasificatorias a Rusia 2018 -con la fecha doble en marzo ante Argentina y Venezuela- y en la Copa América Centenario que se desarrollará en junio en Estados Unidos.

Varios puntales de la Roja, como Arturo Vidal, Gary Medel, Gonzalo Jara, ya se manifestaron a favor de que el director técnico continúe al mando de la Roja. Y todo indica que eso es lo que sucederá. Sin embargo, ayer Pablo Milad, uno de los candidatos a la presidencia de la ANFP, volvió a insistir en que "no se le puede dar en el gusto en todo" al casildense e, incluso, dijo que independiente de si gana su lista o la comandada por Arturo Salah, "Sampaoli tomará la misma decisión", dando a entender que renunciaría.

La tercera es la vencida

En tanto, desde Italia se especula con que Roberto Rodríguez- delantero suizo de 25 años con madre chilena- fue contactado por Sampaoli para que se sume la Roja. Según el sitio Tuttomercatoweb, jugador y entrenador se reunirán en enero en Europa.

Roberto es hermano de Ricardo y Francisco quienes, por distintas razones, nunca han jugado por Chile. Ricardo, lateral zurdo del Wolfsburgo, no fue tomado en cuenta en su momento por Claudio Borghi y ahora es uno de los puntales de Suiza.

Por otro lado, Francisco, volante del mismo club alemán, ya ha rechazado en dos oportunidades el llamado, argumentando que aún es muy joven para elegir definitivamente a un país. Así, Roberto, atacante del Novara de la Serie B de Italia, sería el primero de los Rodríguez en llegar a Juan Pinto Durán.

Nuevo día, nuevas complicaciones. Esa parece ser la consigna de la, aún joven, era de Sebastián Beccacece en Universidad de Chile. Y es que ayer salió a la luz el contrato que firmó todo el cuerpo técnico de Jorge Sampaoli en la Selección Chilena con la ANFP y, en él, se estipula expresamente que, en caso de renuncia, corresponde el pago de una indemnización.

"En el evento que el Cuerpo Técnico decidiere poner término unilateralmente al presente contrato ya sea por la causal de renuncia voluntaria, durante la vigencia del contrato, o por cualquier otra causal, deberá resarcir a la ANFP, mediante el pago de una indemnización (...) por el equivalente a la remuneración anual pactada", reza el contrato que el argentino firmó con la ANFP el 16 de noviembre, tres días antes de presentar su renuncia.

Esto se contradice con lo que el propio Beccacece declaró el sábado en una conferencia de prensa en la que reiteró que no le corresponde cancelar una indemnización -por un acuerdo de palabra con Sergio Jadue- y que, por lo mismo, no incurrirá en ese gasto.

Santiago Albornoz, abogado de la Universidad de Chile experto en materias laborales, se cuadró con el nuevo jefe azul. "(Esa cláusula) me parece abusiva y tremendamente discutible, ya que podría estar en contra de un derecho constitucional que es la libertad de trabajo", aseguró. "Si yo fuera su abogado tendría buenos argumentos para echarla abajo", agregó.