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El proyecto de Lagos que toma forma tras 14 años
La mini urbe denominada Ciudad Parque Bicentenario, que de a poco ha ido creciendo en Cerrillos, podría recibir a sus primeros residentes en tres años más. Expertos contaron a hoyxhoy el impacto social, urbano e incluso los peligros de esta iniciativa.
Portal Bicentenario fue el primer nombre que recibió el proyecto conocido hoy como Ciudad Parque Bicentenario, el cual fue lanzado en mayo de 2001 por el entonces Presidente Ricardo Lagos Escobar. A más de 14 años de su presentación, la de su apelativo no ha sido la única modificación que ha tenido la iniciativa urbana, sino que también ha tenido cambios de fondo, además de varios obstáculos para convertirse en una realidad.
Sin embargo, la semana pasada se dio un gran paso para seguir avanzando en el plan que comprende la construcción de una mini ciudad de 245 hectáreas donde solía ubicarse el aeródromo de Cerrillos, pero que por ahora sólo está formada por un parque y una laguna. Se trata de la aprobación -por parte del Consejo Regional (CORE) Metropolitano- de modificaciones al Plan Regulador de la Región Metropolitana de Santiago (PRMS), decisión que dio el vamos para que las mismas reformas pudieran ser revisadas por la Contraloría, organismo que, de aprobarlas, abriría puertas al inicio de la construcción de la parte más importante del proyecto: entre 15 y 20 mil viviendas, de las cuales el 12% serían sociales.
El alcalde de Cerrillos, Arturo Aguirre (PS), destacó a hoyxhoy la importancia del nuevo espacio urbano, que "dará techo a 60 mil personas, lo que equivale al número de habitantes que hoy tiene la comuna". A esto, agregó haber planteado al Concejo Municipal y posteriormente al CORE que en la obtención de viviendas en el lugar se dé prioridad a familias que han crecido y se han formado en la comuna, por lo cual "tienen ahí su entorno social, afectivo y cultural".
Pero aclaró que aún quedan varios puntos por resolver. "Hay que determinar qué servicios públicos se dispondrán en el lugar, cuáles serán las superficies destinadas a los mismos y, por ejemplo, si las escuelas que se pondrán serán públicas o privadas". Estos aspectos, de todas maneras, fueron insuficiente para detenerlo de decir que "espero y lucharé con todas las fuerzas del mundo para que en el más breve plazo, dos, tres años, nuestras familias puedan estar cortando las cintas de su nuevo barrio y puedan vivir en su casa propia como se merecen".
Diversos impactos
Por supuesto, un proyecto de esta magnitud, que abarcará el paño libre más grande que queda sin construir en la ciudad de Santiago, traerá consigo un importante impacto social.
El arquitecto y urbanista Iván Poduje subrayó que en el ámbito urbano el proyecto tiene dos grandes relevancias. "La primera es que va a permitir localizar una gran cantidad de hogares en un terreno muy central, con Metro, con parque. Hogares que van a estar mucho más cerca de la red de servicios de la ciudad y van a tener menos costos de transporte. Y, la segunda, tiene que ver con el modelo de ciudad que se va a hacer ahí. Es una pieza de ciudad que va a tener servicios, equipamiento, mixtura social, o sea, va a ser un pedazo de ciudad bien planificado, que es lo que a nosotros nos ha faltado en el último tiempo impulsar", comentó.
Sin embargo, Patricio Hermann, de Defendamos la Ciudad advirtió que "el aeropuerto funcionó durante unos 70 años ahí, con diversidad de vuelos. Por lo tanto, en el subsuelo hay muchos residuos de hidrocarburos que son veneno, son todos tóxicos. Lamentablemente, el Gobierno no ha hecho el saneamiento necesario para permitir que el suelo esté apto para construir viviendas". Pese a ello, celebró la gran cantidad de viviendas sociales y subsidiadas por el Estado que se construirán ahí.