El 29 de enero, en Costa Rica, el presidente de Bolivia, Evo Morales y su par chilena, Michelle Bachelet, se reunieron para tratar una "agenda sin exclusiones" por el tema del mar. La cita no fue suficiente, por lo que acordaron continuar en Panamá, en la Cumbre de las Américas de abril. Sin embargo, el encuentro nunca se realizó pues Chile sufría fuertes inundaciones en el norte del país.

En conversación con el diario "La Razón" de Bolivia, el jefe de Estado altiplánico recordó el hecho, dijo que la cita no había sido comunicada y que Bachelet nunca se disculpó por su inasistencia.

Consultado sobre si existe la posibilidad de retomar esa "agenda sin exclusiones", Morales dijo "veremos si hay voluntad, pero será con propuestas oficiales y de soluciones. Y empezar nuevamente. La política de Chile es dilación y dilación. Hubo tantas propuestas en el pasado que no las han cumplido; la demanda es justamente para que cumpla sus compromisos".

En Chile, el presidente de la DC, Jorge Pizarro, cuestionó la versión de Morales. "Hace muchos años que no le creo, de todo hace una cosa comunicacional, tergiversa los dichos y hechos y ha mentido descaradamente", dijo.

Conflicto interno

En la entrevista, Morales conversó sobre los problemas que ha enfrentado con los dirigentes de Potosí, quienes exigen obras de desarrollo para la región. Afirmó que no se reunirá con ellos y los acusó de liderar una lucha política al plantear el federalismo en supuesta coincidencia con dos opositores que están asilados en Paraguay y en EE.UU.

"Yo no soy quien tiene que resolver (las demandas), son los ministros que tienen que ir al diálogo", agregó, luego que desde el sábado el Comité Cívico Potosinista (Comcipo), que encabeza la huelga, comenzara a negociar con los ministros por las obras.

El presidente afimó que no asistirá a las reuniones porque no desautorizará a sus ministros y tampoco se puede descalificar al vicepresidente del país, Álvaro García Linera, que invitó sin éxito a negociar. "No es un problema de reivindicación, sino uno político. Lamento mucho que la ciudad de Potosí esté engañada", acusó.

El ministerio de Asuntos Exteriores de España llamó ayer a consulta a su embajador en Venezuela, Mario Isea, luego de que el presidente Nicolás Maduro calificara a su par Mariano Rajoy como un "sicario". La medida es para expresar la protesta y malestar por las palabras que se consideran "injuriosas" e "inaceptables". Las declaraciones ocurrieron el viernes pasado, mientras Maduro hablaba de la situación de Grecia, donde dijo que "otro sicario de Europa es Rajoy. Rajoy es un sicario del pueblo".

La Unidad Médica Presidencial de Argentina informó ayer que la presidenta de ese país, Cristina Fernández de Kirchner, deberá suspender sus actividades por 48 horas debido a un cuadro de laringitis aguda. Por ello, la jefa de Estado canceló su participación en el acto de celebración por los 150 años de la llegada de los colonos galeses a la Patagonia, previsto para ayer en la tarde. A fines del año pasado, Fernández estuvo hospitalizada una semana por una infección intestinal.

El presidente Barack Obama anunció ayer una iniciativa personal para lograr la paz en Sudán del Sur, al convocar a líderes africanos a reuniones en la vecina Etiopía con el objetivo de evitar que el país más joven del mundo se derrumbe a causa de la guerra civil. "La posibilidad de que haya un nuevo conflicto en una región desgarrada por los enfrentamientos es algo que requiere la atención urgente de todos nosotros", dijo Obama de visita de dos días a ese continente.