Es una lástima lo que está pasando en el norte. Es increíble como nuestro país, largo, angosto, puede tener tanta diferencia de clima. En el norte hay aluviones que inundan las ciudades y en el sur sequías que están quemando los bosques. Lo que me parece más lamentable aún, es que en un país que tiene esta geografía, donde ya ha habido otros aluviones e incendios forestales, todavía no estemos preparados para combatir este tipo de emergencias. Es inaudito.

Escuchaba testimonios de personas que viven en Copiapó. Decían que hace 80 años había ocurrido algo similar. También en 1997 hubo lluvias que generaron destrozos. La ciudad no está preparada para aguantar la lluvia. Sé que son desastres naturales, pero la prevención podría haber evitado tantos anegados, tanta gente en albergues. Hay una responsabilidad de las autoridades y ellos no lo están tomando con la altura de miras que se necesita.

Estoy completamente seguro que esta emergencia va a ser mucho más cara en términos económicos, que si se hubiese hecho un buen plan de prevención antes, donde se hubiesen arreglado las calles, colectores de aguas lluvias, para poder sobrellevar así, un acontecimiento y un fenómeno climatológico como el que se está viendo en el norte.

El invierno todavía no parte, estamos recién en otoño. Es verdad que el fenómeno de El Niño está afectando estas zonas, pero me parece injustificado que el año 2015 no estemos preparados para catástrofes como esta.

Nunca más

Yo espero que se tomen más medidas preventivas. Hay lugares como Chañaral y Alto del Carmen, que van a tener que levantarse de nuevo. Ojalá se reconstruya pensando en que nunca más en la historia de esas localidades, vuelvan a ocurrir sucesos como los vistos. Sabemos que la naturaleza es poderosa, pero no la desafiemos: ¡Hay casas a la orilla de los ríos que se estaban utilizando! Eso no puede ser, es una irresponsabilidad monumental.

Aprovecho la columna para mandarle fuerza a la gente del norte. Es súper importante que se vaya en ayuda de las personas, que se colabore. ¿Cómo hacerlo?: hay diferentes métodos. Uno de ellos es hacerlo a través de Desafío Levantemos Chile que está recibiendo agua, útiles de aseo, colchonetas, abrigo, las cosas de primera necesidad para poder ir en ayuda de nuestros hermanos del norte. Por otro lado, le pido a los frescos de siempre que no se aprovechen de la gente vendiendo el agua y la comida al doble o al triple del precio.

Para finalizar me gustaría decir que no quiero que pasen más estas cosas en Chile. Ya es hora de que se tomen medidas como corresponde. Este, es un llamado a las autoridades a que hagan bien su trabajo. La prevención es súper importante. Ya hemos tenido dos incendios en Valparaíso, y espero, que no haya un tercero. Si lo hay, que existan las medidas necesarias para actuar y por supuesto, lo más importante, que no se lamenten vidas. Todo mi apoyo para las familias que en este momento está sufriendo, con sus parientes muertos o desaparecidos. Ya es hora de que hagamos algo.